Comunican que la readmiten en su puesto de trabajo con todos los derechos  y horas después se desdicen.

Es lamentable por otro lado el comportamiento del Ministerio de Defensa que lo está tolerando.

La Ley de Igualdad y el Estatuto son taxativos en cuanto al disfrute de los derechos reconocidos sobre maternidad, paternidad y conciliación. El despido objetivo o disciplinario decidido cuando el trabajador o trabajadora se encuentran  disfrutando de cualquiera de ellos o tras su reincorporación, está prohibido expresamente por la ley que lo considera vulneración de derechos fundamentales, garantía  que se extiende no solo al momento del disfrute sino que también protege durante los nueve meses subsiguientes el ejercicio.

Algo que no pareció importar a la empresa Perea Roja,  concesionaria del servicio de catering en lo acuartelamientos de Melilla,  cuando despidió a 15  personas el pasado mes de enero entre las cuales se encontraba una trabajadora que aún no se había incorporado de su descanso por maternidad. Este despido debería de considerarse nulo como establece la ley y el ET en su artículo 53.4.a,b y c,  y así lo debió entender la empresa en un primer momento,  ya que en fecha 6 de marzo, tras darse cuenta de su error, envió un correo electrónico al servicio jurídico de UGT, adjuntando una carta  en la que dejaba sin efecto la extinción de la relación laboral,  instándola a reincorporarse a su puesto de trabajo en cuanto finalizara su descanso.

 

Unas horas después la empresa volvió a modificar su parecer y  comunico a través de su abogado vía nuevamente correo electrónico que se lo había pensado mejor y que no reincorporaba a la trabajadora por lo que volvía a estar despedida de facto.

Es evidente a la vista de los hechos que a la empresa Perea Roja,  le importan un bledo los sentimientos y el sufrimiento de esta trabajadora que de la noche a la mañana y sin previo aviso se ha visto despedida, readmitida y vuelta a despedir en el plazo de un mes, pero su comportamiento también da una pista bastante clara del desprecio olímpico que la empresa siente por los preceptos contenidos en la ley y sobre el sentimiento de impunidad que la reforma laboral del gobierno a dado a las empresas.

Hace unos pocos años y tras la impronta de la ley de Igualdad entre Mujeres y Hombres las empresas se lo pensaban mucho a la hora de despedir a mujeres en edad fértil, embarazadas, lactantes o con hijos pequeños y en excedencias, habiéndose disminuido drásticamente no solo por el efecto desmotivador de la norma, también porque socialmente este tipo de comportamientos empresariales estaban muy mal vistos.  Esto ha cambiado,  hoy los derechos adquiridos en el campo de la conciliación familiar la maternidad y la paternidad vuelven a ponerse en entredicho y  lo pone de manifiesto el descaro con que  actúa está actuando la empresa con la connivencia del Ministerio de Defensa.

Desde UGT denunciamos el comportamiento injustificable y abusivo que está teniendo la empresa Perea Rojas con esta trabajadora,  obligándola a iniciar un procedimiento judicial innecesario.  Desde aquí instamos a la empresa a que actué de manera digna y readmita a la trabajadora inmediatamente sin seguir sometiéndola a una situación de sufrimiento e incertidumbre sobre su futuro.

UGT lamenta de igual forma el comportamiento intolerable del Ministerio de Defensa que está consintiendo  hasta el día de la fecha, los abusos de una empresa que les está prestando un servicio, bajo el auspicio de un Contrato del Estado.