La Vicesecretaria General de UGT-Melilla ha manifestado esta mañana que la reforma de la actual Ley Orgánica 2/2010 de salud sexual y reproductiva y de interrupción voluntaria del embarazo, que ha aprobado hoy el Consejo de Ministros supone un retroceso de casi treinta años en los derechos de las mujeres.

Además, genera una gran inseguridad jurídica para las y los profesionales sanitarios, encargados de practicar las intervenciones de interrupción voluntaria de los embarazos, porque da un paso atrás en la regulación de la práctica de un derecho reconocido e implementado desde el año 2010, con supuestos mucho más restrictivos.

Para Concha López la reforma aprobada hoy va a suponer la vuelta al oscurantismo de la mayor parte de las interrupciones voluntarias de embarazo, una situación en la que se pone en riesgo la vida y la integridad de las mujeres al tiempo que se condena a la clandestinidad, la labor de los profesionales que hoy realizan legalmente estas intervenciones.

 

Por último la Vicesecretaria General de UGT-Melilla ha rechazado la reforma de la Ley Orgánica 2/2010 de salud sexual y reproductiva y de interrupción voluntaria del embarazo, por suponer una vuelta de tuerca más a los derechos de las mujeres en general y de las trabajadoras en particular.